Branding Tips

Branding. Seguro que has escuchado más de una vez, y más de dos, el término “branding”. A todos nos suena. Ahora bien, ¿sabemos a qué nos estamos refiriendo exactamente cuando hablamos de branding? Sí, sabemos que es algo relacionado con el marketing, la publicidad, las marcas… pero, ¿qué es exactamente?

En verdad, el branding se puede definir de forma muy sencilla. Hablar de branding es hablar del proceso de creación de una marca. Así, sin más. Pero claro, inmediatamente surgen nuevas cuestiones, ¿qué es una marca? o ¿cómo se construyen?

Respecto a la primera pregunta, quizás sea suficiente responder por boca de la Asociación Americana de Marketing, que nos dice, literalmente, que una marca es “un nombre, símbolo o diseño, o combinación de ellos, cuyo fin es identificar los bienes o servicios de un vendedor, y diferenciarlos así de sus competidores”.

Responder a la segunda cuestión no es tan sencillo. ¿Cómo se construye una marca? Bueno, lo primero que hay que tener claro es que se trata de un proceso. Nunca se deja de construir marca. Y para no ir tomando decisiones improvisadamente, lo mejor, antes de nada, es establecer una estrategia de creación de marca. O lo que es lo mismo, una estrategia de branding.

Lo que sigue son algunos tips elementales, unas preguntas que sería muy bueno que te hicieras ante cualquier proyecto y que ninguna estrategia de branding debe pasar por alto.

1.- ¿Qué tiene tu marca de especial? ¿Qué es aquello que te hace único? La palabra clave aquí es diferenciarse. Puedes vender libros, pero si te quedas simplemente en eso, tendrás una competencia inmensa. Ahora bien, si ofreces algo más que libros, si ofreces al consumidor una experiencia única, si te diferencias lo suficiente hasta llegar al uniqueness, si consigues eso… bueno, en ese caso estarás acercándote a un monopolio. Sí, todos llevamos dentro un posible monopolio. ¿Acaso no somos todos únicos?  

2.- ¿A quién te estás dirigiendo? ¿Cuál es el target? ¡Esto es clave! ¿Existe realmente gente a la que le interesa tu propuesta? Esto hay que tenerlo muy claro desde el principio. Es fundamental hacer un análisis previo. Y una vez hecho, elaborar un profile del cliente tipo. ¡Hay que conocer al cliente!

3.- ¿Cómo vas a comportarte? ¿Cuál será la personalidad de la marca? Imagina tu marca igual que si fuera una persona, ¿cómo sería? ¿joven o adulto?, ¿una persona seria o bromista?, ¿atrevida?, ¿conservadora? Piensa detenidamente en esto, y recuerda: no ofrezcas nada que no puedas cumplir.

El tema es inmenso y da para mucho, mucho más. Pero estas tres claves pueden ayudarte para empezar a pensar más ordenadamente en tu proyecto.